JUJUY

Le ofrecieron un juicio abreviado

En actitud servil y presentarse desnudo, el crudo relato de Nahuel Morandini uno de los presos por tuitear

El docente universitario detalló cómo debió vivir los 53 días de detención, donde recibió tratos denigrantes con el objetivo de confesarse culpable de los delitos que se le imputan

En actitud servil y presentarse desnudo, el crudo relato de Nahuel Morandini uno de los presos por tuitear

Fueron 53 días en los cuales la denigración tenía como objetivo lograr una confesión de culpabilidad, así lo hizo saber Nahuel Morandini, uno de los presos por tuitear en el penal de Gorriti.

El hostigamiento contra el docente universitario comenzaba el 3 de enero, vehículos sin patente merodeaban la casa en la que vive con su pareja y sus hijas. Sus vecinos le advirtieron que eran de la brigada. Al día siguiente, efectivos se presentaron con una orden de citación en la oficina de Delitos Complejos. El documento no tenía número de expediente ni caratula. Los policías quisieron llevarlo a Nahuel en un auto sin patente, él se negó a subirse, pero sí se presentó en el lugar de la citación. Desde ese 4 de enero hasta este lunes 26, Morandini permaneció detenido en el Penal Nº1 de Gorriti (con una breve estadía en el CEOP de San Pedrito). La causa: haber lanzado un tweet sobre una supuesta infidelidad en la pareja de Gerardo Morales y Tulia Snopek.

“Es una cosa de locos que nos salgan a perseguir por tuitear” manifestó el docente universitario en diálogo con La Nación, luego de recuperar su libertad, contradiciendo así las declaraciones radiales que hacía Gerardo Morales que dicha causa no era por la publicación, sino por el daño psicológico que sufrió su pareja y la supresión de la identidad de su hija, delitos de los cuales está acusado Morandini y Roque Villegas. 

La publicación de Morandini a fines de diciembre de 2023 en su cuenta de X ni siquiera llegó a las 50 visualizaciones, la exposición a nivel nacional del asunto llegó con la desproporcionada decisión de la justicia jujeña de dictar prisión preventiva por 60 días contra Morandini y Villegas.

Durante la detención, los tratos denigrantes tenían un solo objetivo: hacer que los acusados reconocieran su culpabilidad. 

“Estaba sin zapatillas, sin ropa interior, sin mis lentes, solo con mi remera y mi pantalón. No podía salir de la celda vestido, tenía que salir desnudo. Cada vez que se presentaba un oficial o el servicio de salud, tenía que desnudarme. Me dieron una palangana para hacer mis necesidades, comía con la mano. Esos días varias veces me filmaron desnudo”, señaló Nahuel Morandini y consideró “es insólito, es vergonzoso, disciplinador, aterrador lo que nos pasó”.

Si bien en un principio se señaló que ambos detenidos habían sido alojados en el sector de aislamiento del penal, el docente expuso “nos dijeron que nos mandaron a un pabellón tranquilo, con personas próximas a salir o que no eran violentas. Pero la verdad es que nada era tranquilo para mí. Yo no estoy habituado. Nunca había estado preso, ni había convivido con un ambiente delictivo”.

Y agregó “me decían que tenía que mirar para abajo, para la pared, con las manos atrás, en una actitud servil. No creo que el trato que recibí yo haya sido una excepción”.

En ese sentido, para Morandini este maltrato solo tenía como objetivo quebrarlo, tal es así, que con su primer abogado defensor, Nahuel supo del ofrecimiento para llegar a un juicio abreviado “me tenía que hacer responsable de cosas que no hice y ¿cómo querían lograr eso? Amedrentándome, trasladándome, presionándome, desnudándome, sometiéndome, para que uno, como le pasa a la mayoría de las personas que están en el sistema penitenciario, se quiebre. No lo hice y no lo voy a hacer”.

Con dicho juicio Morandini pudo haber obtenido una pena de 4 años de prisión efectiva y no los 8 años por lo que ahora va la querella (tanto Tulia Snopek como el Consejo de la Mujer). La defensa del imputado espera va por su sobreseimiento. 

Tratando se justificar las detenciones, Morales señalaba en una entrevista que en Radio Mitre que Morandini y su familia militaban en la Tupac Amaru, organización que lidera Milagro Sala. “No pertenezco a ninguna agrupación política. Yo residí hasta 2014 fuera de Jujuy, en Salta. Sí tengo mis ideas y participé de paros y asambleas docentes, pero lo que dice el ex gobernador no es cierto. Están las pruebas: lo que dice de la conspiración es absolutamente falso. Él acusa a todos de ser armadores de Milagro Sala”, aclaró Morandini y dejando en evidencia el raid persecutorio que lleva a cabo el ex gobernador en Jujuy.

Por último, Nahuel Morandini habló sobre lo que espera de ahora en más de la justicia “acá hubo un abuso de autoridad, primero debería haber un pedido de disculpas sobre mi persona y después podemos conversar. Haber tenido este tratamiento me parece desproporcionado”.



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