Ayer por la tarde, el INDEC difundió su informe semestral respecto a los índices de pobreza e indigencia que hay en la Argentina, números que han alertado al gobierno por la gran cantidad de personas que no pueden satisfacer sus necesidades básicas, situación que en particular en Jujuy marcó un dato alarmante: mientras que la pobreza bajó, el nivel de indigencia aumentó respecto a mediciones anteriores.
El organismo nacional de estadísticas expuso en detalle los números divididos en 31 conglomerados urbanos, en el caso de nuestra provincia, se corresponde a las ciudades San Salvador de Jujuy-Palpalá, donde el índice de pobreza alcanzó el 36,2% en el segundo semestre de 2021, última medición.
Este 36,3% de pobres en Jujuy, equivale a unas 127.463 personas.
En tanto, la indigencia en el conglomerado mencionado fue del 6,3%, es decir, unas 22.064 personas.
En comparación a los promedios nacionales, Jujuy es una de las provincias que mejora los números respecto a la pobreza e indigencia, de hecho, a nivel país, la pobreza asciende al 37,3% y la indigencia al 8,2%.
La provincia, al igual que el resto del país, el segundo semestre de 2021 marcó un descenso de la pobreza: el promedio nacional durante los primeros 6 meses del año pasado el número de personas que no llegaban a cubrir la canasta básica total era del 40,6%, mientras que en Jujuy el número ascendía al 42,5%.
Sin embargo, no ocurrió lo mismo con los niveles de indigencia.
El promedio del país también marcó un descenso (como lo hizo la pobreza en casi 3 puntos porcentuales menos) al situarse en el 8,2 en el segundo semestre, mientras que el primero había alcanzado el 10,7% de la población.
En el caso de Jujuy, el dato reveló un incremento de la indigencia, la cual pasó del 4,7% en el primer semestre de 2021, al 5,7% durante los últimos seis meses del año 2021.
La indigencia significa que las personas ni siquiera llegan a acceder a una buena alimentación, una necesidad básica.