JUJUY

Desde que asumió, nunca hubo rendición de los gastos del gobierno

Tribunal de Cuentas a medida: salió el fiscal que denunció a Morales por amenazas y entró un ex funcionario

La Legislatura aprobó una nueva modificación de la Carta Orgánica del ente lo que derivó en la expulsión de Nicolás Snopek, quien apuntó contra el gobernador. Además, el ex ministro de Hacienda, Carlos Alfonso ocupará una vocalía

Foto: (de izquierda a derecha) Carlos Haquim, Gerardo Morales, Carlos Alfonso
Foto: (de izquierda a derecha) Carlos Haquim, Gerardo Morales, Carlos Alfonso

 

A pocos de finalizar su primer mandato, Gerardo Morales como titular del Poder Ejecutivo enviaba a la Legislatura un proyecto para modificar la carta orgánica del Tribunal de Cuenta y así poder tener un mayor control sobre su funcionamiento, pero las limitaciones al órgano que debe vigilar cómo es el uso de los recursos del estado no quedaron allí y ahora se expulsó al fiscal que denunció al gobernador, pero también se aprobó la incorporación de un ex funcionario radical.

En un mismo día, el parlamento jujeño dio el visto bueno de los cambios en el tribunal, contando con el apoyo del bloque oficialista con ayuda del PJ del sector “rivarolista”.

Primero se constituyó la 2° Sesión Especial, donde se aprobó los pedidos de acuerdo enviados desde el Ejecutivo y que refería a nombramientos en el ámbito judicial, pero también en el Tribunal de Cuentas.

La salida de Juan Ramón Brajcich de la Vocalía Contable del ente de control parece responder al reciente triunfo del Frente Cambia Jujuy en los comicios legislativos, donde el ex funcionario del IVUJ figuraba dentro de la lista de candidatos y candidatas para ocupar una banca en la Legislatura provincial.

Sin embargo, la despedida de Brajcich no supone en realidad un cambio en la estructura del Tribunal de Cuentas, dado que será remplazado por el ex ministro de Hacienda -duró apenas unos meses- Carlos Alfonso.

Eso, sin contar que en realidad las 4 vocalías incorporadas en 2019 funcionan bajo la designación del oficialismo.

Es que por aquel entonces los 3 pedidos de juicio político contra miembros del Tribunal no prosperaron y como última carta, el gobierno de Morales apuntó a una modificación de la carta orgánica con la creación de estas vocalías, un proyecto “express” que ingresó en la Legislatura y fue incorporado a la orden del día a último momento.

La diputada Alejandra Cejas, ya denunciaba “lo que intenta el mandatario es evitar los controles sobre el destino que tuvieron los recursos de todos los jujeños desde que asumió la gobernación”.

La legisladora envió distintos pedidos de informe para que el Ejecutivo rinda cuentas de los gastos concretados por la gestión Morales, pero nunca tuvieron respuesta.

De hecho, la última vez que pidió rendición de cuentas le valió la suspensión del parlamento jujeño, al exigir información sobre los contratos firmados entre la provincia y Rubén Rivarola durante la pandemia.

 

Denuncia y expulsión

La semana pasada el fiscal del Tribunal de Cuentas, Nicolás Snopek denunciaba ante la justicia a Gerardo Morales por el delito de amenazas -causa por la que la justicia jujeña hace poco sentenció a 3 años y 6 meses de detención a Milagro Sala- luego de haber recibido un llamado telefónico por parte del mandatario provincial en 2020.

Los hechos se remontan cuando el entonces fiscal realiza una denuncia en la Oficina Anticorrupción para que investigue la presunta incompatibilidad del acuerdo firmado entre la provincia y las empresas del diputado Rivarola y su par Liliana Fellner.

Tras dar curso a la misma, Morales llama a Snopek. Además de amenazarlo, le endilga algunas acusaciones, según indicó en la denuncia.

Pasadas las horas de darse a conocer esta denuncia contra el titular del Ejecutivo, sorpresivamente la Legislatura nuevamente modifica la estructura del Tribunal de control y aparta al denunciante, con la eliminación de la fiscalía que ocupa.

Ello ocurrió en la 3° Sesión Ordinaria, donde se aprobó la Ley N°6.226 de Derogación de la Ley Provincial N° 6.148 – Modificación Orgánica del Tribunal de Cuentas de la Provincia. “La misma, intenta una reestructuración con la consecuente adopción de procedimientos y técnicas aplicables, tendiente a lograr alcanzar la transparencia institucional que vino siendo uno de los objetivos del gobierno central, dotándose a la institución de herramientas más eficientes en la búsqueda incipiente de controlar el gasto público, aumentando su celeridad y eficacia, y evitando dilaciones burocráticas que provocan gastos jurisdiccionales poco útiles” señala el sitio de la Legislatura jujeña.

Lejos de permitir la transparencia, el Tribunal de Cuentas de la provincia cada vez se ajusta más a las necesidades de un gobierno que no puede dar respuesta sobre el destino de los fondos públicos.

 



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