JUJUY

Apuntó a la falta del cumplimiento de una política sanitaria

“En Jujuy se dijo que no se debía politizar la pandemia” el duro testimonio de una víctima del covid

La pareja de una docente fallecida por el virus cuestionó los dichos del director del COE y ahora candidato Omar Gutiérrez, quien señaló que educadores contrajeron la enfermedad “reuniones sociales” y no en el ámbito educativo

“En Jujuy se dijo que no se debía politizar la pandemia” el duro testimonio de una víctima del covid

 

La lista de docentes fallecidos a causa del covid se incrementa día a día en Jujuy, que ostenta uno de los peores números de todo el país con al menos 25 educadores víctimas del virus desde el inicio del ciclo lectivo 2021 y a pesar de ello, la gestión Morales-Calsina se niega a retomar la modalidad virtual de las clases, dejando expuestos a sus trabajadores, situación que fue señalada no sólo desde grupos de docentes, sino también por las propias víctimas.

Tal es el caso de la pareja de una docente que recientemente perdió la vida, que lanzó una dura carta en redes sociales para señalar el padecimiento que tuvo que pasar luego de contraer el virus, donde las autoridades brillaron por su ausencia.

Bajo el título “hablemos de covid, pero en serio”, el testimonio realizó cuestionamientos a la falta de una política sanitaria -tanto a nivel nacional como provincial-, pero que en Jujuy se destacó su utilización política, aun cuando desde un principio se expresó que no debía ser así.

Asimismo, las críticas se posaron principalmente el desempeño del director del COE y ahora candidato del oficialismo, Omar Gutiérrez, quien indicó que docentes no contrajeron la enfermedad en sus lugares de trabajo, sino en “reuniones sociales”.

A continuación, el texto completo:

Nuevamente el manejo politizado de la pandemia.

Recuerdo que el año pasado prometieron, acto de por medio, sesenta millones de dosis de vacunas y que para abril ya estaría la mayor parte de Argentina inmunizada. Ya tenemos más de ochenta mil muertos y más de cuatro millones de personas contagiadas.

No es descabellado pensar que no tuvo éxito algún plan estratégico sanitario, si es que existió alguna vez, lo que permite admitir que las acciones llevaron demasiado tiempo en implementarse. Lamentable.

 Comenzando de esta manera a llegar tarde algún tipo de acción ante la urgencia de vacunar como primera e indispensable medida para evitar más contagios, pero también evitar más muertes.

Aquí, en Jujuy se dijo desde un primer momento que no se debía politizar la pandemia. Que era inmoral y que se iban a tomar todas las medidas para evitar esta situación.

Además, se iban a poner a disposición 493 médicos, que se ocuparían de una población cercana a los cinco mil jujeños y jujeñas.

No hago otra cosa que mencionar textualmente lo que las autoridades sostenían en ese momento, cuando afirmaban que iban a "fortalecer el sistema de internación domiciliaria con todos los recursos disponibles, de modo que el paciente cuente con un médico de cabecera, medicamentos y oxigeno que eventualmente haga falta”.

Como así también, disponer de “el reconocimiento del test PCR en los casos de tratamiento ambulatorio y de internación domiciliaria”.

Lamento tener que contradecir tales afirmaciones.

Ya cambiaron para siempre la vida de más de 1,100 familias jujeñas y seguirán cambiando otras tantas más. En particular la de los docentes.

Todavía estamos esperando el resultado de la denuncia penal del Estado a los policías que pasaron la frontera y trajeron el covid. Seguimos esperando que den nombres de quienes vacunaron a sus familiares, en ámbito de la salud privada, pero también entre ellos algún familiar de funcionario. Porque según el propio gobernador, solo faltaba que vacunen al perro y al gato.

Hoy, después del anuncio de un programa provincial de vacunación, con vacunas que provee la Nación, no hay vacunas para la población de más de cuarenta años. Lo que sí nunca dejaron de mencionar o de imprimir fueron folletos con los candidatos, donde se los mencionan de manera impersonal y montan una campaña con los recursos de todos.

¿Es necesario todo esto? ¿Es necesario que el responsable del COE monte su campaña en nombre del cambio, de la salud y la educación, cuando todavía existen familias que siguen llorando a sus muertos?

Hoy Gutiérrez sale alegremente a afirmar que los docentes contrajeron coronavirus en reuniones sociales y que no hay prueba de que los contagios se produjeron en otro ámbito.

Con este razonamiento, debemos inferir que fue culpa de los docentes mismos el haberse enfermado y además haberse muerto por su propia negligencia e imprudencia. Qué sandez más elocuente de la poca sensibilidad y de la falta de reconocimiento de errores que permitieron esta situación tan penosa y deshumanizada.

La insensibilidad, la activa y cuestionable participación política, la utilización de medios y recursos provinciales, ponen al descubierto hacia donde estamos yendo.

Sostener este tipo de opinión, no es para oponerse a nadie, es porque el cruel privilegio de relatar en primera persona la experiencia de la pandemia, te permite tener la autoridad necesaria para poder refutar cualquier opinión antojadiza, interesada y especulativa.

La muerte, que todo te quita, deja rastros imborrables de dolor y de miedo por lo sucedido, pero también por lo que vendrá. Es por esta razón que no vendría nada mal un espacio para el respeto, solamente eso.

Se lo deben a la gente.



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