JUJUY

En una carta que enviaron al presidente

Enfermeros de Jujuy acusan al gobierno de Morales de desviar fondos enviados por la pandemia

En un duro documento enviado a Alberto Fernández, el Colegio provincial apuntó a la responsabilidad de la gestión radical en la propagación de los contagios y fallecimientos por covid en Jujuy

Foto: Facebook APUAP
Foto: Facebook APUAP

Tras la llegada de un equipo de especialistas desde el gobierno nacional a la provincia, el Colegio de Enfermeros de Jujuy envió una carta de agradecimiento al presidente Alberto Fernández, oportunidad que aprovechó que pedir una videoconferencia para detallar la crítica situación sanitaria que atraviesa el territorio.

Con fecha del pasado 30 de julio, el organismo hizo llegar su agradecimiento al mandatario nacional por la visita de la Subsecretaria de Calidad, Judit Díaz Bazán y el Director de Intervención en Ciclos Vitales, Marcelo Bellone “para auditar la terrible crisis sanitaria que ha sembrado el terror en la población jujeña”.

Es que según detallaron, en Jujuy “se agotaron los respiradores se completó la ocupación de las camas UTI, hay más de 300 enfermeros contagiados y un número similar que se encuentra cumpliendo cuarentena sobre una planta de 1800 enfermero del Estado, lo que implica que los 1.200 restantes se encuentran sometidos exigencias infrahumanas y sobre expuestos a los riesgos de contagio del virus porque ha quedado en evidencia el desvío de los fondos públicos que debían haberse invertido oportunamente para la compra de equipo de protección personal, para ampliar la capacidad de internación hospitalaria y para el pago del sueldo de los aproximadamente 200 enfermeros que fueron incorporados en el mes de marzo con la promesa de un contrato de trabajo formal que jamás se llevó a cabo: estos tampoco cuentan con obra social, ni seguro de riesgo de trabajo, ni licencias por razones de salud, ni aportes jubilatorios, ni salarios familiares, ni nada y, cuando por desgracia se contagian son internados en hospitales de campaña en condiciones paupérrimas de higiene y salubridad”.

En la misma dirección, apuntaron “la solución que el gobernador Morales ha implementado para cubrir tamaño déficit de capital humano consistió en incorporar en situación de igual precariedad a un grupo de supuestos egresados de Institutos que se encuentran impedidos de otorgar títulos, y que no cuentan con ninguna experiencia lo cual, además del delito que eso conlleva (art. 248 C.P) constituye un verdadero atentado contra la salud pública”.

“Igualmente grave es la situación de los médicos: en estos 40 días que se disparó la pandemia ya fallecieron 2, otros 3 están en respirador y 4 en terapia intermedia, a lo que se suma el hecho de que sobre un total de 1.200 médicos que hay en la provincia, 1.100 forman parte de la población de riesgo y se encuentran en licencia. Además, varios Jefes de Servicio del Hospital Materno Infantil han renunciado: la condiciones higiénicas y climáticas de los hospitales de campaña, son pésima, los médicos terapistas con los que contaba la provincia apenas cubrían las necesidades de los tiempos pre pandémicos, por lo que hoy no contamos con esta especialidad para atender los centenares de pacientes críticos que inevitablemente surgirán en los próximos días”.

“Esta también es una situación atribuible a la inacción culpable del gobierno que, conociendo tales debilidades del sistema en los primeros 90 días de amenaza pandémica no tomó una sola medida para formar e incorporar médicos y enfermeros en dicha área”.

Sobre el control de la situación epidemiológica, el CEJ apuntó “hoy lo único cierto es que con una limitadísima capacidad de testeo y con una reserva de tests que el gobierno oculta,  hemos llegado a 1.800 casos comprobados con un factor de duplicación de 7 días, que, de mantenerse, implica que a fines de agosto habremos alcanzado la letal cifra de 30.000 contagiados para cuya atención harían falta números de 1.500 camas de UTI, otros tantos respiradores y un equipo de salud imposible de conformar porque la provincia no paga los sueldos ni les otorga las más mínimas condiciones de seguridad. El actual colapso del sistema público ha quedado de manifiesto con la petición formulada a los sanatorios privados para que aporten 70 camas con oxigenoterapia y otras tantas de terapia intensiva, lo cual implica que se restará de modo significativo la capacidad de atención sanatorial de las demás patologías que desde antes cubrían la totalidad de las plazas existentes”.

Además, señalaron que durante la videoconferencia que mantuvo Morales el pasado 17 de julio, este mintió al presidente sobre el caso de los 2 policías que originaron la ola de contagios.

“En esa oportunidad el gobernador contó como una anécdota que el virus había sido importado por dos policías que habían cruzado a Bolivia a comprar coca, lo cual es falso: los dos policías - uno de ellos comisario- formaban parte de la custodia del gobernador, del ministro de Seguridad, del Jefe de Policía y de otros 60 funcionarios que integraban la comitiva que viajó nada más y nada menos que a controlar la seguridad de las fronteras para evitar la penetración del virus boliviano a nuestro país. Es absurdo suponer que dos miembros de alto rango de la custodia policial del gobernador hubieran hecho abandono de servicio lanzándose a cruzar ilegalmente una frontera internacional cerrada de ambos lados - demostrándole al gobernador que las fronteras eran inseguras-, e ir a comprar coca a Bolivia para su posterior contrabando a nuestro país, tomándose el tiempo necesario como para mantener contactos estrechos que infectarse ambos con covid-19. Y, y al regresar no sólo los exoneraron de la fuerza, sino que el Gobernador, en su hora de aparición televisiva diaria, los describiera 15 días después como héroes por la proeza de haber cruzado a comprar coca y volver contagiados. Si el gobernador creyó necesario justificar públicamente los delitos cometidos por sus custodios, es porque en su conciencia alberga la responsabilidad de haber sido él quien los envío y habilitó a cruzar la frontera para cumplir una misión inconfesable que, con seguridad, no se trató de la compra de coca que en Jujuy y en su despacho abundan”.

“Señor presidente, el gobernador Morales quién se permitió fraguar una anécdota falsa para encubrir su responsabilidad ante el presidente de la nación y el pueblo, es el único responsable por la introducción de la pandemia en Jujuy, y por los abandonos de personas y la muerte que sobrevendrán en cuanto se dupliquen, tripliquen y cuadriplica en los actuales 1.800 infectados por la falta de medios y de personal de la salud provocados por el desvío de fondos públicos, y también es el responsable de que durante los primeros 90 días monto un show televisivo diario de sesgo proselitista con el que se encargó de encubrir la realidad que hoy nos apremia”.

Sobre la visita de las autoridades nacionales, el Colegio indicó “hemos decidido enviarle esta carta por el hecho de que los funcionarios nacionales que visitan la provincia, aún no han mantenido contacto eficiente con nosotros ni con la asociación de médicos, ni con los demás efectores de la salud que estamos padeciendo este drama. Aunque Sí hemos advertido por sus manifestaciones a través de los medios de comunicación, una enorme empatía con los responsables de esta crisis”.

Por último, subrayaron “señor presidente le imploramos mantener una videoconferencia  con nosotros y los restantes efectores de la salud para que pueda usted dimensionar la catástrofe que se avecina por la acción del virus y la mala fe del espectro político que gobierna Jujuy”.



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