POLÍTICA

Presentará el caso ante la Oficina Anticorrupción

Escándalo en el Concejo Deliberante de La Quiaca, edil denunció que intentaron sobornarlo para suspender al intendente

El parlamento local tenía dentro del temario, el pedido de expulsión de Blas Gallardo presentado por la oposición. Al tomar la palabra el legislador Jorge Tejerina expuso que le ofrecieron dinero, una casa y otros “beneficios” a cambio de su voto

Escándalo en el Concejo Deliberante de La Quiaca, edil denunció que intentaron sobornarlo para suspender al intendente

 

De ordinaria no tuvo nada la sesión que se realizó ayer en el Concejo Deliberante de La Quiaca, donde un edil denunció ante el cuerpo parlamentario que intentaron sobornarlo para que votara a favor de la suspensión del intendente.

En el quinto encuentro previsto por el Concejo, entre los temas a tratar se destacó el pedido de expulsión de Blas Gallardo. Al tomar la palabra el legislador Jorge Tejerina, este lanzó una grave acusación, señalando el ofrecimiento de una coima a cambio que inclinar la balanza contra el jefe comunal.

“Me pasó algo increíble, intentaron sobornarme, intentaron corromperme”, comenzó relatando en el medio de la sesión. Dirigiéndose a la presidenta del Concejo, la oficialista María Laime, Jorge Tejerina detalló que el ofrecimiento provino de “un futuro funcionario, por supuesto que se harán las correspondientes presentaciones en la justicia y la comunidad sabrá quien es el corrupto, quien es el mafioso”.

Si bien no brindó el nombre, las sospechas apuntan a Dante Velázquez, por la naturaleza del ofrecimiento.

“Yo tenía una posición tomada, como saben que yo inclino la balanza en este Concejo Deliberante, que puedo estar votando a favor del oficialismo o votando a favor de la oposición, me ofrecen un trabajo para mí después del 10 de diciembre en la Legislatura, área comunicación, no vas a tener necesidad de viajar a Jujuy, vas a cumplir funciones aquí”, señaló Tejerina respecto a la oferta.

Sin embargo, ese no fue el único favor que recibiría el concejal si accedía a apoyar la expulsión de Gallardo. “Ayuda económica para mi ex pareja, mensual, más de 200 mil pesos; una beca para mi hija que está cursando estudios universitarios, mensual, más de 200 mil pesos, una casa en Jujuy”.

Y agregó como último ofrecimiento “una bolsa llena de plata, una bolsa negra como lo es este hecho negro, corrupto, mafioso, un millón de pesos”, la compensación era “a cambio de bajarlo al intendente, votá a favor para que lo suspendan, hecho inédito en mi vida personal, además este corrupto habló con familiares, con llegados para que yo acepte el soborno”, subrayó.

En consecuencia a lo expuesto, el concejal advirtió “tengo pruebas” y adelantó que realizará la denuncia ante la Oficina Anticorrupción. “Pobre, pero honrado”, sentenció.

 Así, Tejerina explicó “cuando días pasados estaban los municipales (en referencia cuando se presentaron para reclamar el pago de sus salarios, conflicto desatado por la decisión del gobierno de Morales de enviar la mitad de los recursos de la coparticipación -a modo de disciplinamiento- y, que finalmente tuvo que interceder Sergio Massa para destrabar el conflicto) tenía una posición fijada, hoy cambio de opinión a raíz de esta corrupción que reina en futuros funcionarios”.

 

Intento de golpe institucional

Mientras que el gobernador acusa al kirchnerismo y a la izquierda de propiciar un golpe institucional en su contra para deslegitimar las protestas sociales en contra de la reforma constitucional, la ciudad fronteriza que dirige el opositor Blas Gallardo vive un constante clima de desestabilización política.

En los últimos días se vivieron dos situaciones en particular: la primera fue el intento de incendio que se produjo en horas de la mañana del 5 de julio. El hecho fue capturado por las cámaras de seguridad y fue el propio intendente quien marcó las dudosas circunstancias en que se produjo, no hubo ninguna consigna de reclamo y la inacción de la Policía ante el llamado desde el municipio, al advertir sobre el atentado.

Ese mismo día, pero ya en horas de la tarde, un grupo de manifestantes se congregó en las inmediaciones del palacio municipal, esta vez sí con reclamos explicitados en pancartas. A través del registro fílmico, Gallardo señaló la presencia de punteros de su futuro sucesor Dante Velázquez, el dirigente del PJ.

El segundo acontecimiento ocurrió el 13 de julio, cuando en sesión extraordinaria, concejales opositores quisieron suspender por 3 meses al intendente. La excusa fue la falta de pago de sus haberes a trabajadores municipales.

El último cronograma de pagos de la administración pública jujeña sorprendió a más de uno/a: docentes sufrieron cuantiosos descuentos por participar de los paros, mientras que varios municipios y comisiones municipales advirtieron una merma en los fondos enviados desde la Tesorería de la provincia. El punto en común era que los parlamentos locales habían manifestado su rechazo a la reforma constitucional.

En el medio del conflicto con las comunidades indígenas en lo que podría llegar a ser un avance sobre sus territorios, Blas Gallardo se encontraba en Buenos Aires realizando algunas presentaciones ante el INAI -Instituto Nacional de Asuntos Indígenas-. Por su parte, la presidenta del Concejo Deliberante, María Laime intentaba reunirse con el ministro de Hacienda y próximo gobernador, Carlos Sadir para que gire el dinero faltante. Ello fue aprovechado por concejales opositores del Frente Cambia Jujuy y el PJ para convocar a una sesión donde se planteaba la suspensión por 3 meses de Gallardo y el pedido de un juicio político.

 

Si bien la sesión fracasó, para el jefe comunal la misma dejó en claro el intento de dejarlo fuera del escenario político antes que concluya su mandato. “El Concejo Deliberante con el aval del gobernador Morales y Rubén Rivarola, está sesionando para suspenderme del cargo de intendente. Están forzando a sesionar a concejales, en contra de su voluntad y reteniéndolos en el recinto, privándolos de su libertad”. En particular, Gallardo señalaba que uno de los concejales que responden a él fue “obligado” a sesionar, aún cuando hacía poco tiempo había estado en terapia intensiva, incluso, llegó a descompensarse en el recinto.



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